"Con Domingo y El Pachá"

Nuevo programa ya tiene nombre

Puedes titularlo así "Nuevo programa ya tiene nombre, 'Con Domingo y El Pachá'", dijo riendo, con esa espumosa alegría que contagia, Frederik Martínez. Ese es el nombre definitivo del nuevo programa que saldrá al aire próximamente por Color Visión, de 12 del mediodía a 4 de la tarde.

El nombre definitivo se decidió espontáneamente en la entrevista con Diario Libre.

Domingo insiste en que "no venimos a competir, venimos a compartir", en clara referencia al hecho de que a esa hora se transmite por Telesistema, canal 11, el popular programa que produce Jochy Santos "Divertido con Jochy".

"La idea existe desde hace cuatro años", confesó Bautista, "pero no fue hasta ahora que se dio. De hecho, fue a El Pachá a quien llamó Domingo Bermúdez para proponerle ese horario y ahí pensaron en mí", explicó el también.

Para El Pachá el ir y venir semanalmente de Nueva York, donde reside con su familia, a Santo Domingo será un reto. "Habrá una que otra semana en que por X razón no podré venir y ahí lo haremos seguramente vía satélite. Eso también le dará un valor agregado al programa", aseguró.

"Con Domingo y El Pachá" se espera que salga al aire en marzo, y contará con la producción de Rafelito Taveras, un experimentado 'animal' de la televisión. "Será un programa muy segmentado, con realitys shows, concursos, transmisiones en vivo desde fuera del estudio; un programa superlativamente completo", manifestó el productor del programa "la Super Revista" que desde hace más de 20 años se transmite por Color Visión.

Discípulo

El Pachá reconoció que es deudor del estilo de Domingo. "Realmente mi escuela fue Nelson Javier, El Cocodrilo, quien sí bebió directamente de la fuente estilística de Domingo. Pero como sabes, Domingo y yo somos amigos y para mí es un honor trabajar junto a él", reconoció a la vez que recordó sus inicios.

Sobre qué sería capaz de hacer en caso de no poder ser animador de televisión, El Pachá reconoció que no sabe hacer otra cosa. "Trataría por lo imposible, de no hacer lo malo; pero si la necesidad me lleva a hacer algo extremo, por una necesidad de un hijo o la familia, pues a coger un pico y una pala y a trabajar se ha dicho".

Un impulso decisivo

El Pachá recuerda que su más grande frustración fue cuando tenía unos 13 años, que no lo dejaron pasar a un estudio de televisión. Y ese momento juró que algún día lo llamarían para que entrara por la puerta grande. "Pasaron unos pocos años, y se dio mi profecía", narró el popular animador, quien detalló que es un hombre de "pluriempleo", pues con su talento y su laboriosidad realiza varios programas y segmentos de programa tanto en la radio como en la televisión de Estados Unidos, desde el amanecer hasta la noche.

Adiós a la salsa

El baile forma parte de la personalidad ante las cámaras, tanto de Domingo como de El Pachá, en especial la salsa. "Creo que el hecho de que la salsa se haya refinado, que se haya estilizado, la ha hecho perder conexión con el público. La salsa de hoy es muy sublime, muy lírica, muy orquestada. La de aquellos años era una salsa muy espontánea. El uso de la computadora hoy le ha hecho perder empatía con los sentimientos. Además otros géneros musicales -el reggaetón, el dembow, la bachata- ha diversificado la oferta de sonidos", filosofó Domingo, productor radial de "Domingo Latino".

Vivir en Nueva York

Ante otra pregunta El Pachá reconoció que es duro vivir en Nueva York. "A la gente se le vende sueños. En Nueva York hay más pobres que aquí. Hay gente que hace 15 años no puede venir a este país, porque no pueden. Tengo en mente un libro que se llamaría "La vida de un animador llamado Pachá", donde quiero escribir que Nueva York es un engaño; es un mal de frustraciones, de mentiras, de falsedad. Donde tienes que pelear con las demás nacionalidades y la frustración está en el diario vivir. El que llega a Nueva York se tranca de tal forma que no puede virar para atrás porque es peor. La vergüenza, el orgullo, no le permiten. Le digo a todos, que no cojan una yola, no se arriesguen", concluyó.